Nuestro cuerpo es una máquina que funciona a través de distintos sistemas. Ante esta característica, el mal funcionamiento de alguno de ellos, puede provocar síntomas de leves a graves. El sistema endocrino es un conjunto de órganos y tejidos que se encargan de producir hormonas. Las cuales influyen en el funcionamiento de muchas células de nuestro cuerpo. Este sistema se compone de hipotálamo, hipófisis, tiroides, paratiroides, glándulas suprarrenales, glándula pineal, páncreas, ovarios y testículos. El hipotiroidismo es una alteración de la glándula tiroides y a continuación, te contamos todo sobre esta condición.
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¿Qué es el hipotiroidismo?
Nos referimos a hipotiroidismo, cuando la glándula tiroides funciona de forma lenta. Produciendo así las hormonas tiroideas inadecuadamente, afectando funciones vitales de nuestro cuerpo. Debido a esta condición, puede presentarse hinchazón facial y de los ojos, la voz se nota más ronca y la dicción se hace más pausada. Entre otros síntomas que afectan el día a día del afectado.
La glándula tiroides se encarga de segregar hormonas encargadas del metabolismo. Por lo que su alteración, puede afectar funciones importantes del cuerpo, como el estado de la piel, la fertilidad, la producción de calor, la digestión, el crecimiento, la frecuencia cardíaca, la combustión de calorías, etc.
Son dos hormonas las que componen a la tiroides, siendo estas:
- T4: Tiroxina.
- T3: Triyodotironina.
En la hipófisis se crea la hormona que estimula la tiroides, llamada TSH. Dependiendo de la concentración de hormonas tiroideas presentes en la sangre, la hipófisis acelera o retarda la liberación de TSH. Cuando estos funcionamientos son lentos, se presenta entonces el hipotiroidismo. Condición que es más frecuente en mujeres de edad avanzada, pero puede desarrollarse a cualquier edad.
Causas del hipotiroidismo
Antes de hablar sobre las causas del hipotiroidismo, es importante tener en cuenta que existen dos tipos de él: primario y secundario. Cada uno de ellos puede tener una causa diferente.
Hipotiroidismo primario
La causa principal del tipo primario es la tiroiditis de Hashimoto. Se trata de una afección en la que la tiroides se destruye de forma gradual.
El hipotiroidismo primario puede estar causado también por:
- Tiroiditis o inflamación de la tiroides.
- Tratamiento de cáncer tiroideo o de hipertiroidismo.
- Carencia de yodo.
- Radiación en las zonas de la cabeza y el cuello.
- Alteraciones hereditarias de la tiroides.
Hipotiroidismo secundario
Este tipo de hipotiroidismo ocurre cuando la segregación de hormona TSH es insuficiente. Lo que sucede por una alteración en la glándula hipófisis. Esta clase de problema es mucho menos frecuente que el tipo primario.
Síntomas del hipotiroidismo
La hipoactividad de la glándula tiroides, genera la ralentización de muchas funciones corporales. La sintomatología de esta condición, puede presentarse de forma gradual y sutil. Puede llegar a confundirse esta enfermedad con problemas del corazón o depresión.
- Se vuelven apagadas las expresiones faciales.
- La dicción se vuelve lenta y la voz ronca.
- La cara y los ojos se hinchan.
- Los párpados comienzan a notarse caídos.
- El pelo cae de forma descontrolada y toma un aspecto descuidado.
- La piel se nota áspera, gruesa y escamosa.
El hipotiroidismo, además, provoca un cansancio extremo, se sufre de estreñimiento y comienza a aumentarse de peso, siendo muy difícil perder estos kilos de más. También existe intolerancia al frío, aumentan los calambres musculares y aparecen dolores en las manos, similares o desarrollando síndrome de túnel carpiano.
Por otra parte, el pulso se hace más lento, las palmas de pies y manos adquieren una tonalidad ligeramente naranja y desciende la parte lateral de las cejas. Las personas de mayor edad se muestran confundidas y olvidan cosas con mayor facilidad. Es posible presentar alteraciones en los ciclos menstruales, en el caso de las mujeres. Como también, concentraciones elevadas de colesterol en la sangre.
Cuando no es tratado, el hipotiroidismo puede provocar anemia, insuficiencia cardíaca e hipotermia. Puede incluso llevar al paciente a un coma mixedematoso, que resulta potencialmente mortal, al ralentizar demasiado la respiración. Cuando el flujo de sangre al cerebro disminuye demasiado, el organismo no tiene forma de funcionar adecuadamente.
Este síndrome es menos evidente conforme el afectado posee más edad. En personas jóvenes, es más frecuente presentar aumento de peso, calambres musculares, incapacidad para tolerar el frío y hormigueo en manos y pies.
¿Cómo se diagnostica el hipotiroidismo?
El diagnóstico de esta patología se realiza a través de la determinación de los niveles de hormona estimulante de la tiroides en sangre. Según los síntomas y la exploración física realizada por el médico, es posible sospechar de hipotiroidismo. Pero su confirmación se realizará a través de un sencillo análisis de sangre en el que se mide la concentración de TSH. Encontrando una tiroides hipoactiva, cuando la concentración de tal hormona es elevada.
Existen casos poco frecuentes de hipotiroidismo, donde la hormona TSH es secretada de manera inadecuada. En este sentido, es necesario realizar una segunda analítica. Donde se medirá además la concentración de hormona tiroidea T4. El diagnóstico será respaldado por una concentración baja de tiroxina. Entonces, el especialista se encargará de evaluar el funcionamiento de la glándula hipófisis, con pruebas de función hipofisaria y también por medio de imágenes.
¿Se puede tratar el hipotiroidismo?
Sí, es posible tratar el hipotiroidismo y ayudar al paciente a vivir de forma plena con este padecimiento.
El tratamiento lo que busca es cubrir el déficit de la hormona tiroidea. El médico escogerá entre las opciones farmacológicas existentes, según las necesidades del paciente. Generalmente se administra la hormona T4 de forma sintética. También, puede obtenerse la hormona de forma seca, que es obtenida de la tiroides de animales, pero no es un método habitual. Puesto que esta presentación de la hormona, es menos efectiva que la T4 sintética. En casos urgentes, cuando el paciente entra en coma mixedematoso, se administran las hormonas T4 y T3 por vía intravenosa.
Se inicia el tratamiento administrando la hormona tiroidea en pequeñas dosis. Puesto que aplicarla en dosis muy altas, puede causar efectos adversos de gravedad. Las altas dosis pueden ser necesarias en casos extremos. La dosis principal y su aumento, son muy bajas cuando el paciente es de edad avanzada, ya que es mayor el riesgo de presentar efectos secundarios. Comenzará a aumentarse la dosis gradualmente, hasta que se normalice la concentración de TSH en la sangre. En caso de embarazo, la administración de la hormona deberá ajustarse.