El folículo piloso es un saco que hace crecer el pelo. Se extiende desde la epidermis hasta la dermis, insertándose un poco en la hipodermis, que es una capa grasa que está justo debajo de la piel. Cuidar nuestros folículos pilosos es clave para prevenir la alopecia. Te contamos más sobre ellos:
La caída del cabello y la disminución de la capacidad de nuestro cuerpo para responder a los estímulos son el resultado de una serie de desequilibrios químicos que afectan a la estructura microscópica de los folículos pilosos.
Estructura del folículo piloso
Los folículos pilosos son una estructura compleja que forman la raíz del pelo y crecen hasta la superficie de la piel. Así, encontramos estas partes:
- Glándulas sebáceas: Son las que lubrican y protegen el cabello con las grasas que producen continuamente. Son estimuladas por los andrógenos e inhibidas por los estrógenos.
- Músculo erector del pelo: También llamado músculo piloerector, es un músculo pequeño, involuntario y liso que recorre la piel. Es el responsable de que el vello crezca perpendicular a la piel y no en contra de ella, como el pelo
- El bulbo piloso: Se encuentra en la zona más profunda de la dermis. Es el origen del pelo. En su interior se encuentra la papila folicular, que está formada por melanocitos, melanosomas, células madre y vasos sanguíneos que proporcionan nutrición al cabello.
- Los folículos pilosos: Se encuentran en la piel. Están rodeados por una vaina externa y otra interna, que rodea el tallo del pelo.
Además, encontramos las papilas dérmicas en la capa más externa de la dermis superficial, donde hay un plexo vascular que garantiza el suministro de oxígeno y nutrientes a las células, asegurando el correcto crecimiento del pelo.
El ciclo de crecimiento del cabello tiene tres fases: anágena, catágena y telógena. Cada fase se caracteriza por la alternancia de períodos de crecimiento del cabello (anágeno) y de regresión (telógeno). La transición entre las fases se conoce como fase catágena.
¿Cuál es la importancia de estos folículos para la salud capilar?
Cuando el pelo está debilitado, no crece ni se cae. El problema suele estar en los folículos. El estado de estos folículos determina en gran medida la buena salud de nuestro cabello. Con el tiempo, los folículos pilosos se encogen, creando un cabello cada vez más fino y corto, hasta que se llega a un punto en el que no crece ningún pelo nuevo e incluso el folículo muere. En estos casos, la única opción para volver a tener unos mechones frondosos es el trasplante capilar.
Si nos encontramos en esa primera etapa en la que notamos que nuestro cabello es cada vez más fino y se cae, podemos optar por tratamientos contra la caída del cabello como el Minoxidil. Se trata de un vasodilatador que estimula los folículos pilosos, proporcionando un mayor flujo sanguíneo, frenando la caída del cabello y estimulando su nuevo crecimiento.
Además, existe la opción de un tratamiento con Dutasteride, un antiandrógeno que ha demostrado ser eficaz contra la caída del cabello, ya que evita que éste pierda su calidad por la acción de las hormonas masculinas. Además, el Plasma Rico en Plaquetas (PRP) combinado con la mesoterapia capilar nutrirá y estimulará los folículos de las zonas afectadas por la alopecia.
Sin embargo, si no tratas adecuadamente la foliculitis en el cuero cabelludo, los folículos pueden sufrir daños. Por suerte, esta afección inflamatoria común tiene fácil solución. Si has notado signos de pérdida de cabello o hinchazón y protuberancias en el cuero cabelludo. Puedes consultar con especialistas en el área.
Descubrimiento para regenerar el folículo capilar
Han descubierto el mecanismo de estrés que mantiene a las células madre del folículo piloso en una fase de reposo prolongada, impidiendo el crecimiento del cabello. Esto podría ayudar a encontrar formas de promover el crecimiento del cabello. Los folículos pilosos pasan por un ciclo de crecimiento y descanso a medida que envejecemos. Esto se debe a la proliferación de las células madre del folículo piloso, que son las responsables del ciclo.
La fase de crecimiento es el momento en que el pelo crece. Durante esta fase, los folículos pilosos están activos y el pelo crece. Durante la fase de reposo, estas células permanecen inactivas y el pelo puede caerse fácilmente. Por este motivo, si las células madre del folículo piloso permanecen inactivas y no regeneran nuevo tejido, puedes perder el pelo o quedarte calvo.
Científicos de Harvard han identificado el proceso biológico por el que el estrés crónico afecta a las células madre del folículo piloso en un estudio realizado con ratones. Un nuevo estudio publicado en Nature ha confirmado los hallazgos anteriores de que el estrés puede provocar la caída del cabello. La investigación descubrió que una importante hormona del estrés hace que los folículos pilosos entren en una fase de reposo durante la cual no regeneran el folículo piloso ni el cabello.
Los científicos han identificado el tipo específico de célula y la molécula que transmite la señal de estrés a las células madre, y han demostrado que esta vía puede utilizarse potencialmente para restaurar el crecimiento del cabello. El Dr. Ya-Chieh Hsu, profesor asociado de biología regenerativa y de células madre en Harvard y autor principal del estudio, explicó: «Descubrimos que el estrés realmente retrasa la activación de las células madre y cambia la frecuencia con la que las células madre del folículo piloso regeneran los tejidos».
El factor estrés para la regeneración del pelo
Cuando los científicos observaron modelos de estrés crónico en los folículos pilosos, observaron que las células madre de los folículos pilosos permanecían en una fase de reposo sin regenerar el tejido.
La hormona corticosteroide, una importante hormona del estrés segregada por las glándulas suprarrenales, se vio influida positivamente por el estrés crónico. Los investigadores pudieron reproducir el efecto que el estrés tiene sobre las células madre administrando corticosteroides, que son el equivalente al cortisol en las personas.
Hsu también descubrió que la hormona del estrés, el cortisol, estaba implicada en la caída del cabello. Cuando eliminó la fuente de estrés en sus ratones, la caída del cabello se detuvo.
Buenas noches
Estoy presentando una serie de pequeñas espinillas en el cuero cabelludo ¿Puedo estar padeciendo de foliculitis?
Hola, Rodrigo
Esas pequeñas espinillas o pequeños bultos rojos, son un síntoma de foliculitis. Sin embargo, antes de aplicar cualquier medicamento, es conveniente que acudas al médico para asegurarte de que se trata de eso y para que te indiquen el mejor tratamiento.
Un saludo.