Las marcas y la creencia popular, nos hacen pensar que, para lucir un cabello saludable, es necesario invertir demasiado en productos costosos. Sin embargo, la realidad es que es posible cuidar de nuestra melena de forma muy económica y natural. Dado que estos cosméticos suelen añadir en sus ingredientes, químicos que acaban causando daño capilar. Algo que no sucede al aplicar sustancias orgánicas, como el aceite de romero en el cabello. Aquí te diremos cómo usarlo.
Hablamos de una excelente alternativa para paralizar la caída del cabello y brindar mayor luminosidad a la melena. A lo largo del siguiente post, podrás descubrir cómo aplicar el aceite de romero en el pelo, para qué se utiliza y demás datos que serán de tu interés.
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¿Qué es el aceite de romero?
El romero es un arbusto mediterráneo, con muchas propiedades. A lo largo de los años, se ha utilizado este elemento en diferentes tratamientos. Tanto en el sector dermatológico, psicológico, ginecológico y capilar. Pero al convertirse en aceite, su principal uso se da sobre el cabello.
El aceite de romero ofrece todo tipo de beneficios. Es antifúngico, antiséptico y revitalizante. Propicia el buen riego sanguíneo hacia el cuero cabelludo, mejorando la oxigenación y nutrición del pelo. Brinda también diferentes vitaminas como A, B y C, además de zinc, hierro y fósforo.
¿Para qué sirve el aceite de romero en el cabello?
Dadas todas las propiedades que posee el romero, son muchos los beneficios que el aceite de romero en el cabello puede traer. Estos son:
- Permite un crecimiento del cabello más fortalecido. Puesto que el romero es un estimulante natural, permite un mejor riego sanguíneo a las raíces del cabello. Enviándoles los nutrientes suficientes a cada pelo, para que crezcan más sanos.
- Impide que el cuero cabelludo se infecte. Y es que por sus propiedades antifúngicas, problemas como la tiña no llegan a desarrollarse. Esta erupción de la piel aparece por una infección micótica que el aceite de romero consigue evitar.
- Retrasa la aparición de las canas. Puesto que el romero ayuda a que se mantenga la pigmentación del cabello.
- Evita la temprana caída del cabello, estimulando la irrigación sanguínea. Por lo que el pelo se mantiene nutrido y fortalecido.
- Combate la producción excesiva de sebo, al regular la grasa natural del cuero cabelludo. Esto reduce las posibilidades de sufrir irritaciones en la zona, causadas por la sedosidad.
¿Cómo hacer el aceite de romero?
Para crear tu propio aceite de romero, debes hacer lo siguiente:
- Adquiere ramas de romero y lávalas muy bien, remojándolas en un recipiente en el que puedan quedar hundidas.
- Una vez secas, colócalas en un recipiente con aceite de oliva, cubriéndolas por completo con él.
- Mantenlo así por aproximadamente un mes, en un espacio oscuro o de luz escasa.
- Procura agitar el recipiente todos los días.
- Pasados los 30 días, cuela el aceite para retirar el romero.
¿Cómo utilizar el aceite de romero en el cabello?
El romero forma parte de todo tipo de remedios caseros, para tratar problemas del cabello y la piel, como la dermatitis y la calvicie. Este ingrediente tiene la capacidad de estimular el crecimiento del pelo, al tiempo que evita las descamaciones. Siendo por ello, un elemento muy popular. Además, aporta al cabello una mayor fortalece y luminosidad, por lo que su uso, vuelve la melena más saludable y hermosa.
Por esta razón, a continuación, presentamos diferentes formas de utilizar el aceite de romero en el cabello. Para que puedas aprovechar al máximo sus propiedades. Combinándolo con otros ingredientes que incrementarán el beneficio para la melena.
Mascarilla de aceite de romero
Para realizarla, necesitarás:
- Media taza de yogurt.
- 1 cda de manzanilla.
- 1 cda del aceite de romero.
- 2 tazas de agua.
Coloca en una olla las 2 tazas de agua, con el aceite de romero y la manzanilla. Déjalo al fuego durante algunos minutos hasta que entre en ebullición. Llegados a este punto, mantenerlo en hervor por 3 minutos y luego retirar. Permite que la mezcla se enfríe totalmente y luego, mezcla el líquido con el yogurt, para hacer una mezcla pastosa. Aplica esta crema sobre todo el cabello y deja que actúe por 20 minutos. Retira la mascarilla con agua fría, sin dejar residuos. Repite el procedimiento al menos dos veces por semana.
Aceite de romero en el champú
Además de aplicarlo como mascarilla, otra forma de tomar todos los beneficios de este aceite, es con el champú común. Para lograr un excelente resultado, sigue estos pasos:
- Hazte con un champú neutro: el cual será la base para crear el champú perfecto. Una recomendación sería utilizar champú para bebés. Ya que su fórmula es muy suave y delicada con el cuero cabelludo.
- Añade cápsulas de vitamina E: estas pueden hallarse en cualquier tienda naturista o en farmacias. Son un excelente complemento, que resulta perfecto para evitar la caída del pelo y fortalecer el cuero cabelludo.
- Aplica los ingredientes al champú: tanto el aceite de romero como las cápsulas de vitamina E, serán de gran ayuda para la melena. Colócalas dentro del champú y agita bien para conseguir que se mezclen.
¿Cómo aplicar el aceite de romero en el pelo?
Este aceite debe aplicarse del mismo modo que se hace con cualquier otro champú. Humedece tu cabello y realiza suaves y circulares masajes con el aceite. Permite que actúe por algunos minutos y posteriormente, retira todo del cabello con mucha agua.
¿Cuándo se contraindica el aceite de romero en el pelo?
Si bien, el romero es un producto totalmente natural, no puede ser utilizado por cualquier persona. Todos los remedios naturales deben ser vigilados, para tener en cuenta si causan algún problema de salud. El romero en cualquiera de sus presentaciones se contraindica en los siguientes casos:
- Alérgicos al romero.
- Mujeres en proceso de gestación o lactancia.
- Individuos que padezcan dermatitis atópica o su piel sea demasiado delicada. En estos casos, se puede utilizar aceite de almendras como sustitución.
- Si se tiene el cabello excesivamente graso. Se debe utilizar el romero de una forma más directa, evitando en todo momento cualquier sustancia aceitosa.