Para vernos y sentirnos bien una de las cosas que debemos cuidar, es nuestra salud digestiva. Mantener un cuidado sobre ella es importante para beneficiar la salud en general. No siempre las bacterias resultan ser malas. En el microbiota, hay muchas de ellas que son necesarias para que la salud digestiva sea buena. Si sientes que tienes problemas digestivos, lo mejor es acudir al médico para que te diagnostique y trate a la brevedad posible.
¿Qué es salud digestiva?
La salud digestiva trata del bienestar del sistema digestivo. Se trata de mantener un microbiota en equilibrio. Eso se logra teniendo buena digestión y un transito intestinal funcionando a la perfección. Si además de eso las defensas son las adecuadas, se goza entonces, de una salud óptima en el aparato digestivo.
El aparato digestivo tiene una función específica, que es extraer de los alimentos las sustancias que servirán para dar energía al organismo. También para crear los elementos que conforman los sistemas y órganos de nuestro cuerpo. Cuando esto funciona a cabalidad, significa que nuestra salud digestiva es buena.
Las molestias digestivas se han hecho muy comunes en la actualidad, se muestran generalmente como incomodas hinchazones. Esto es provocado por la ansiedad y el estrés. La pandemia, el estar encerrados por mucho tiempo, también generó muchos problemas digestivos. También algunos alimentos, causan enfermedades digestivas.
¿Qué es microbiota?
En nuestros intestinos hay miles de bacterias que tienen funciones especificas que benefician nuestra salud digestiva y general. Hay al menos 1000 tipos de bacterias distintas en nuestros intestinos.
El microbiota nos protege de virus y bacterias que generan enfermedades y regulan la energía que usamos en nuestro cuerpo. En nuestros intestinos viven al menos el 70% de las células inmunes de nuestro organismo y por encima de cien millones de neuronas que van conectadas al cerebro. Sus funciones son tan importantes que los expertos la definen como un nuevo órgano. Son esenciales para mantener la salud digestiva.
Importancia de la salud digestiva
Cuando tienes un mal funcionamiento intestinal, existe una hinchazón que resulta muy molesta. Al normalizar el sistema digestivo, esta desaparece. Una dieta adecuada, mejora la salud digestiva, pero también regula la actividad motora y sensitiva. A la vez que ayuda a recobrar el equilibrio emocional. También al mejorar la salud digestiva se facilita la pérdida de peso, los resultados son a largo plazo, pero de una forma saludable. Sin tener que hacer dietas restrictivas.
Síntomas de una mala salud digestiva
Existen diversos síntomas y signos que avisan que la salud digestiva no esta bien. Al sentir uno o mas de ellos, es conveniente acudir al médico.
- Dolor y exceso de gases.
- Estreñimiento.
- Vómitos y nauseas.
- Dolor en el tórax y/o quemazón en el pecho.
- Problemas para tragar.
- Mal aliento y mal sabor en la boca.
- Sinusitis y asfixia nocturna.
- Regurgitación
Causas de una mala salud digestiva
Son diversas las causas que provocan una mala salud digestiva. Factores como el ambiente, tu estado de salud, alimentación y estilo de vida, pueden incidir en la aparición de afecciones intestinales. Comer alimentos grasos e irritantes, fumar, la obesidad, algunos fármacos son factores de riesgo. Cualquier molestia debe tratarse de inmediato, no hacerlo puede desencadenar enfermedades graves como ulceras en el esófago, hemorragias y hasta cáncer.
¿Cómo se trata esta afección?
Lo primero que debes hacer es acudir al médico, este identificará la causa, te pedirá algunos estudios, según lo que arroje la revisión. A partir de ahí podrá hacer el diagnóstico exacto y decidir cuál es el tratamiento indicado para tu caso. El tratamiento puede ser sencillo, como cambiar algunos hábitos de alimentación. También puedes requerir medicamentos. En casos mas graves puede requerirse una cirugía poco invasiva vía laparoscópica.
Consejos y ayudas
Sigue estas recomendaciones para que conserves una excelente salud digestiva.
Come alimentos que contengan fibra
La fibra retiene agua, haciendo más blandas las heces. La fibra vegetal ayuda a la eliminación de los desperdicios de nuestro cuerpo. Además, contribuye a que las defecaciones sean más fáciles y abundantes. La fibra insoluble evita el colon irritable, baja los niveles de colesterol y favorece el transito intestinal. Consume avena, verduras, frijoles, frutos secos, para dar al organismo la fibra que necesita.
Come de 5 a 6 veces al día
Para que el sistema digestivo digiera de mejor manera los alimentos, es conveniente que distribuyas la comida en 5 o 6 veces. Cambia el hábito de comer abundante dos o tres veces al día. Comienza a comer menos cantidad cada vez y distribuye tus comidas en desayuno, merienda a media mañana, comida, merienda y cena. Además de mantener una buena digestión, también aceleras el metabolismo, logrando bajar o mantener tu peso. Además, aportas más energía a tu cuerpo.
Cuida tus intestinos consumiendo omega 3
El omega 3 mantiene saludables los intestinos, ya que se convierte en un escudo protector, que evita sangrados por ingesta de medicamentos, perforaciones y úlceras. Consume salmón, atún, sardinas, nueces, soja, semillas de lino. Ingiere omega 3 por lo menos 3 veces a la semana.
Evita alimentos grasos e irritantes
Los alimentos grasos, comida chatarra, procesada, el pan, comidas muy picantes o especiadas. Son difíciles de digerir. El sistema digestivo debe esforzarse mucho para procesar este tipo de alimentos. También el tabaco y el alcohol, irritan el aparato digestivo. Prefiere comidas con mas fibra, cocidas a la plancha, horno, sin muchos condimentos. Así como productos orgánicos y aceite de oliva.
Toma mucha agua
El agua funciona como una solución para el estreñimiento. Además, favorece el tránsito intestinal debido a que ablanda las heces y hace más fácil eliminar los desechos de nuestro cuerpo. Se recomienda beber al menos 8 vasos de agua al día. Para mantener un excelente tránsito intestinal.
Haz ejercicios diariamente
Evitar el sedentarismo regula la función intestinal. Debes hacer del ejercicio, parte de tu rutina diaria. No tienes que hacer ejercicio extremo, un paseo de media hora, trotar, bailar, pasear en bicicleta, será suficiente para mantenerte activo. Así como para conservar una buena salud digestiva.