Nuestro cuero cabelludo es el responsable de la producción del cabello. Este no es más que un filamento creado para la protección de nuestro cráneo, producido por los folículos pilosos. El pelo se constituye de raíz y tallo, formados de una proteína rica en azufre llamada queratina. Es importante el cuidado del cabello para que su funcionalidad se mantenga adecuadamente. Pero este, puede sufrir quiebre, resequedad o caída, debido a los malos tratos que hacen lucir al cabello dañado.
Si bien, el cabello crece con el único objetivo de proteger, hoy en día no es visto de esa forma. En la sociedad, el cabello tiene un gran valor estético. Por lo que poseer un cabello dañado, con faltas de higiene y vitalidad, no resulta atractivo. Además, la carencia de cuidados al pelo, provoca todo tipo de inconvenientes en el cuero cabelludo, como la alopecia o calvicie. Así que si estás buscando conocer cuáles son los factores que provocan un cabello dañado, en este post lo encontrarás.
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¿Cuáles son las características de un cabello dañado?
- Puntas abiertas.
- Fácil de romper.
Aspectos que llevan a tener un cabello dañado
Cambios en la temperatura
La salud de nuestro cabello puede afectarse de manera considerable, debido al frío o al calor. En días calurosos, es normal que por las vacaciones nos expongamos más al sol. Las altas temperaturas causan la resequedad de la melena, lo que la lleva a perder su vitalidad. Por su parte, en los días fríos es muy fácil que el cabello se quiebre. En esta época, el ciclo capilar entra en reposo por el estrechamiento de los vasos sanguíneos.
Uso de secadores y planchas de pelo
La estructura capilar y la fortaleza del cabello, pueden verse afectadas por uno de los más dañinos factores externos, los secadores y las planchas. Estas herramientas tienen la particularidad de cambiar la forma del pelo, al exponerlo a temperaturas muy altas. Esto resulta perjudicial para la queratina, además de quemar la melena, romperla y minimizando su hidratación. Es por ello que se recomienda un uso moderado o evitarlos por completo.
Aplicación de productos químicos
Cualquier producto para el cabello que cuente con componentes químicos, resulta perjudicial para él. Los principales en provocar daño a la melena, son los champús que integran sulfatos, parabenos y siliconas. Que, aunque consiguen limpiar el pelo, también se encargan de resecarlo. Sus ingredientes alteran la producción de sebo, además desestabilizan el pH del cuero cabelludo. Esto causará que el pelo se encuentre áspero, quebradizo y sin vida.
Calidad del agua
Mucho se habla sobre la influencia del agua en la salud capilar. El agua es el elemento principal en el lavado del cabello, lo que permite retirar por completo los productos utilizados. Cuando es un agua con alto grado de salinidad, puede causar deshidratación, rotura e incrementa la caspa en el cuero cabelludo.
Contaminación
Nuestro medio ambiente está cargado de todo tipo de sustancias dañinas para el cabello. Cuando el pelo está sucio, se encuentra débil, opaco y tiende a caer más rápido. Por lo que es necesario tener una buena rutina de limpieza capilar y cuidar la melena de agentes contaminantes. Cuando la suciedad es demasiada, obstruye los folículos pilosos, lo que genera diversos problemas como la alopecia.
¿Se puede revertir el cabello dañado por malos tratos?
Nadie desea lucir un cabello dañado. Este tipo de pelo es complejo para peinar, tiene poco volumen y se encuentra siempre reseco, por lo que jamás luce bien. El cabello maltratado es una combinación de factores ambientales, poco cuidado capilar y exceso de aparatos de altas temperatura. Aunque parece imposible, si existen opciones que ayudan a revertir las consecuencias del maltrato capilar. Estas son:
Protege el cabello del clima
El cabello crece en nuestra cabeza para protegerla del clima, enfrentándose regularmente a este. Pero el pelo puede verse afectado por factores como la lluvia, el sol y el polvo. Lo que puede llevar a que las hebras se quiebren constantemente. Para mejorar esta situación, se debe ofrecer una mayor protección al pelo, manteniendo una hidratación semanal. También es importante nutrirlo, usando aceites naturales y mascarillas que ayuden a fortalecerlo y restaurar su salud.
Cuida la melena de los aparatos de calor
Al momento de moldear el pelo, los aparatos más utilizados son los secadores, las planchas y las tenazas. Estos elementos funcionan a temperaturas muy elevadas. Por lo que, el principal daño al cabello, es provocado por dichos aparatos. Resecando y volviendo a la melena quebradiza. Esto se puede contrarrestar al utilizar protectores térmicos antes de exponer el cabello al calor.
Estos productos deben aplicarse en la cabellera húmeda, antes de utilizar el secador, la plancha o la tenaza. Previo a comenzar su uso, deben aplicarse en el cabello seco. Esto permitirá que se cree una barrera protectora, que cuide al pelo de las altas temperaturas, sin que pierda suavidad o brillo.
Trata con delicadeza al cabello
El pelo es mucho más frágil cuando está humedecido. Aunque es más fácil de desenredar en este estado, la realidad es que se expone a un daño mayor. Por lo que es necesario extremar la delicadeza al peinarlo, para evitar dañar la cutícula. Cuando se desenreda el cabello sin ninguna precaución, las hebras se abren y se quiebran.
Se recomienda entonces, peinar la melena tras haber aplicado algún acondicionador. Productos que funcionan como barrera y ayudan a soltar los nudos más difíciles. Es importante peinar el cabello suavemente en secciones y con un cepillo de cerdas separadas.
Extrema la atención del pelo teñido
Para cambiar nuestro estilo, por lo general recurrimos a los tintes para modificar el color del cabello. Sin embargo, la mayoría de estos productos tienen entre sus ingredientes, elementos químicos dañinos para la melena. Lo que provoca una reducción en su volumen y brillo. Así que, si se desea tener el cabello teñido y en buen estado, es importante reforzarlo, aplicando una rutina especial para este tipo de pelo. Ayudándole a mantener su hidratación y combatir cualquier otro daño.
No lavar diariamente
El cabello recién lavado puede generar una muy agradable sensación. Pero practicar lavados muy frecuentes no es beneficioso para el pelo. Esto altera la producción de sebo, modifica el pH del cuero cabelludo, provoca resequedad y quiebre.
Para cuidar el cabello se recomienda el uso de champú natural, que pueda higienizar, nutrir e hidratar cada pelo. Además, no debemos olvidar aplicar un buen acondicionador, que combata la resequedad.
Lavar el pelo cada dos o tres días es lo recomendable para que se mantenga limpio, pero sus aceites naturales puedan formarse de forma adecuada.