Una de las intervenciones quirúrgicas que más han aumentado en los últimos tiempos es la conocida como blefaroplastia o cirugía para mejorar la apariencia de los párpados que permite eliminar la acumulación de grasa, los párpados caídos y modificar la forma, tanto de los párpados inferiores como de los superiores.
A pesar de donde se encuentran, la operación de párpados está calificada como sencilla ofreciendo tiempo de recuperación bastante breves. Esa es la razón por la que el precio de esta intervención quirúrgica es de lo más asequible para el común de los mortales.
Si bien cualquier persona mayor de edad que no sufras complicaciones de salud importantes puede someterse a una blefaroplastia, lo cierto es que el perfil habitual de quienes se lo realizan son personas a partir de cuarenta años. Estas suelen hacerlo como consecuencia de la aparición de bolsas y la caída de la piel de esta zona del rostro. Algunos, de hecho, también recurren a ella para mejorar su visión o, simplemente, para modificar la forma de su área ocular.
Cuando decimos que se trata de una operación corta nos referimos a que rara vez supera la hora y media en la que el equipo médico retirará el exceso de piel junto a los depósitos de lípidos que se han acumulado en los párpados. Una vez acabado con este proceso es estira la piel cerrándose la apertura a través de una mínima sutura por debajo de la piel que resulta invisible.
La intervención, que comienza tras la inyección de anestesia local en el paciente, tiene unos de los postoperatorios más rápidos ya que, tras guardar reposo un par de días, ya puede hacer vida normal utilizando gafas de sol y protegiéndose del sol con crema protectora para evitar que la cicatriz se torne visible. Cuidados mínimos que, eso sí, habrá que extender durante al menos un mes en los que la vida del paciente será completamente normal.
Tipos de blefaroplastia
Los pacientes que se someten a una blefaroplastia pueden escoger entre tres tipos de intervenciones, en función del resultado final que deseen:
Blefaroplastia inferior, para mejorar el aspecto del párpado de abajo, suprimiendo las bolsas y las arrugas de esta zona.
Blefaroplastia superior, para mejorar el aspecto del párpado de arriba y suprimir las bolsas y las arrugas de esta zona.
Blefaroplastia completa, para mejorar el aspecto de ambos párpados, retirando las bolsas y eliminando las arrugas de ambas zonas.
Cabe señalar que muchas de las personas que se someten a este tipo de operación deciden combinarla con otros tratamientos como el lipoFilling o relleno de grasa en busca de una mejora sustancial de la apariencia de los párpados con el objetivo de rejuvenecer el rostro.
Tanto si estás pensando en someterte a una operación de párpados para modificar esta zona o mejorarla estéticamente o acabar con algún problema de salud debes saber que el proceso será rápido, sencillo, indoloro gracias a la anestesia, breve en cuanto a la recuperación, de lo más económico y con resultados garantizados.